Hace mucho tiempo que no actualizo este blog, y no es porque no haga cosas que enseñaros por aquí, es por el poco tiempo que tengo para editar las fotos y redactar los textos. Aprovecho que ya he acabado este año la época de comuniones para enseñaros las mesas dulces que hice la temporada pasada y ésta que acaba de terminar. Todas en el mismo post para no aburriros con los detalles de ellas una a una. De todas formas en mi Facebook podéis estar al día de todo lo que voy preparando. y ver todos los detalles de las mesas dulces.
Me encanta preparar las mesas de niñas, porque dan mucho más juego que las de niño, las jaulas, las casitas, las mariposas.....todo queda precioso en una mesa dulce de niña.
Aunque las de niño también quedan muy bonitas, en celeste y blanco nunca fallan.
Las de fútbol tampoco podían faltar en el repertorio, cómo ésta del Barca.
Seguimos con las de niñas, usando palet que sirven para todo, y siempre están de moda.
Todas las guirnaldas, de tela o de cartón están hechas a mano, las de tela por mi señora madre a la que siempre estoy dando trabajo....
Los mantelitos también los hace ella, y es que visten mucho una mesa, como éstos de cuadritos de vichy.
De nuevo otras tantas de fútbol, usando como base de la mesa cesped artificial.
Del Real Madrid o de la Unión Deportiva Motril,,,,,cumpliendo el sueño de cada niño, algunas con portería incluida.
Y no sólo de fútbol vive el hombre, hay otros deportes como el ajedrez, que también tuvo su momento con esta mesa dulce temática de ajedrez, con tarta tablero incluida.
En el campo se preparan cosas muy bonitas, como esta mesa donde me llevé parte del mobiliario de casa para componer este bonito candy bar.
Las de este año han estado marcadas por las puertas traseras y las ventanas recicladas, cada una con su propia personalidad.
Tanto la de Dani como la de Rafa quedaron preciosas, cada una en su estilo.
La de la dulce Mariola quedó preciosa con esas haditas tan bonitas colgadas de las puertas que hacían de trasera.
La de mi sobrina Cayetana pensada y estudiada hasta el último milímetro por su madre, con un resultado diferente y fresco.
La de Rocío tenía que ser elegante con toque rústico, y al final se consiguió ese doble efecto, además usando unas ventanas antiguas que restauré yo misma.
La de Rocío era semejante a la que el año pasado le hice a Marta, por expreso deseo de su madre, un modelo, con palets, que nunca pasa de moda.
La de Fran y Lucía eran dos mesas gemelas que tenían que ir separadas, pero que, al final, por problemas de espacio, se hizo como una, convirtiéndose en una mesa de casi cuatro metros de largo muy bien distribuida. De nuevo con las mismas ventanas de la de Rocío.
Y la única de fútbol de este año ha sido ésta de Alex del Madrid, una mesa muy elegante en tonos azules, amarillos y blancos.
Y, por último, la de Ana, con otro juego de ventanas también restauradas por mi, con banderines de cartón en los mismos tonos de la mesa, con un árbol que preside las mesas con galletas mariposa colgadas. Ésta vez sin manteles, sobre una tabla de madera encima de dos caballetes. Preciosa me pareció la combinación.
Muchas horas de trabajo que se compensan con las caras de los niños y la alegría de sus madres en este momento tan especial que es la Primera Comunión.
Espero que os hayan gustado.
Lidia.